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¿Es legal colocar cámaras ocultas para controlar a los trabajadores? | Grupocfi

Escrito por admin | Feb 15, 2016 12:00:00 AM

Hay empresas que aprovechan la instalación de cámaras de videovigilancia no solo para garantizar la seguridad de la empresa, sino también para llevar un control del trabajo de sus empleados.
CONTROL LABORAL RECONOCIDO POR EL ESTATUTO DE LOS TRABAJADORES
El control laboral es reconocido legalmente en el artículo 20 del Estatuto de los Trabajadores, el cual permite al empresario adoptar las medidas que estime más oportunas de vigilancia y control para verificar el cumplimiento por el trabajador de sus obligaciones y deberes laborales, siempre que se guarde en su adopción y aplicación la debida a su dignidad humana y teniendo en cuenta la capacidad real de los trabajadores disminuidos.
Por lo tanto, el ET permite utilizar medidas de control sobre sus trabajadores, pero, ¿permite la LOPD este tratamiento de datos?
REQUISITOS PARA INSTALAR CAMARAS EN EL LUGAR DE TRABAJO
Algunos trabajadores han denunciado a sus empresas por instalar cámaras de video vigilancia sin haber prestado su consentimiento. Al respecto, la AGPD ha indicado reiteradamente que cualquier empresa puede instalar cámaras para el control de sus trabajadores siempre que se cumplan una serie de requisitos:
– Que se haya informado previamente a los trabajadores de que estas cámaras pueden utilizarse para el control laboral, además de para la seguridad del centro

– Que la empresa cumpla con la LOPD y su reglamento de desarrollo: Inscripción del ficheros en el RGPD, elaboración del documento de seguridad, colocación de carteles informativos, disposición de formularios para el ejercicio de derechos ARCO, y notificación a los correspondientes representantes de los trabajadores.
Como consecuencia, no será necesario pues recabar el consentimiento expreso del trabajador para ser grabado por las cámaras instaladas por el empleador en el centro de trabajo, pero sí estar debidamente informado, lo que restringe al empleador la posibilidad de colocar cámaras ocultas para pillar “in fraganti” al empleado desleal.